En 1999, Alejandra Chaverri digitalizó varios álbumes de su familia para adquirir experiencia con el uso de programas en la fotografía. De este proceso resultó un libro de artista, impreso digitalmente con calidad de archivo, con imágenes de seis generaciones de su familia.

Este pequeño proyecto abrió el portal para conocer al historiador y coleccionista de fotografía costarricense Manrique Álvarez Rojas, de cuya colección de negativos de vidrio de principios de siglo se realizó una primera exhibición de fotografías del fotógrafo costarricense Manuel Gómez Miralles que tuvo gran acogida por el público y se exhibió en lugares como la Casa de la Cultura de Heredia, la Alianza Francesa y el Costa Rica Country Club.

El proyecto anterior se convirtió en el portal para buscar material de otros fotógrafos, libros antiguos, álbumes familiares dentro y fuera de Costa Rica. Este material, en conjunto con las narrativas a su alrededor, amplían el conocimiento de fotógrafos como Mario Roa, Francisco Coto, Alfonso Barahona, Cubero, Harrison Nathaniel Rudd, Francisco Zamora, Amando Céspedes, Víctor Cubero y Mario Ramírez.

Asimismo, se han logrado documentar materiales fotográficos que se encuentran en museos o bibliotecas en otros países.